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miércoles, 26 de octubre de 2011

Evolución en imágenes







Un poco inspirado en el post anterior: Un equilibrio difícil, he tratado de modelar ésta sabina buscando un equilibibrio en el límite y que aún así visualmente funcione. No sé si lo he conseguido aunque en general estoy bastante satisfecho con el resultado "final".
Pero es que claro, este post está incompleto porque falta...¡un dibujo!. Un dibujo de su deseable aspecto futuro por lo que el próximo post estará dedicado a éste.
Sólo decir que el paño blanco está tapando una rama trasera, larga y que por su grosor he tenido a bien no podarla por el momento porque, quizás junto lo que ya se le ha hecho, podría convertirse en una intervención demasiado invasiva y perjudicial por tratarse únicamente de una primera intervención.
Y, bien mirado, tal vez el extremo final de la rama que cae hacia abajo podría estar a todas luces pidiendo una poda. Pero cómo para podar siempre hay tiempo...



HE TRATADO DE RESPONDER COMENTARIOS ASÍ COMO DE ESCRIBIR POR OTROS BLOGS, PERO NADA, QUE EL BLOG NO ME DEJA.

Espero os guste.

Saludos.

viernes, 21 de octubre de 2011

Un equilibrio difícil

No, no se trata de uno de mis bonsais (ya me gustaría); lo tengo eso sí desde hace tiempo guardado en favoritos y es raro el día que no le echo un vistazo. A tal punto me tiene hechizado, un equilibrio tan difícil y a la vez tan conseguido...


Se trata de un Pemphis acidula. De un artista afincado en Bali (cuyo nombre desconozco) y, aunque únicamente sea por este árbol en concreto, me declaro fiel seguidor suyo.

Demasiadas veces he visto alcornoques con esta y hasta hace poco aparentemente escesiva inclinación, a los cuales sólo me los imaginaba aprovechables tras un drástico cambio de ángulo de plantado con el fin de levantarlos. El caso es que desde que tengo conocimiento de éste árbol los miro ya con otros ojos y estoy en el convencimiento de que un alcornoque de esta guisa podría dar un resultado bastante similar, de una calidad sin duda bastante inferior, pero similar.









martes, 18 de octubre de 2011

Thurifera resultona

Durante estos últimos días y con la idea de hacer manos en cuanto al alambrado se refiere, ni corto ni perezoso me he puesto con esta thurifera.
Si bien el material de partida no es muy allá que digamos, tampoco lo es el resultado final, si he hecho unas buenas horas de alambrado que me han permitido ganar un poco de sultura y, de paso, pasar un buen rato. Bueno, eso de pasar un buen rato es un decir ya que esto del alambrado es un latazo.


Y, como no hay nada más que aportar con este post, termino ya con unas fotos de la misma del antes y su después.
Sólo comentar que, en la foto del después, podeis apreciar como esta, por su forma demasiado triangular, da claramente la sensación de estar ante un árbol joven. Defecto que unicamente se corregirá con el tiempo cuando trate de darle un poco más de redondez a las masas de verde pero y, por el momento, esto es lo que hay.

Espero os guste aunque como ya os digo, no pasa de resultona.

miércoles, 12 de octubre de 2011

Se mira pero no se toca

Allá por el mes de Abril, en una de las muchas búsquedas de sabinas, me encontré de casualidad y por lo de lo inesperado del momento, con un hallazgo muy agradable.

Este hallazgo no era otro sinó que el de un tejo yamadori creciendo a duras penas en una morrena de rocas y piedrecitas de distinta granulometría que caían hacia abajo y a lo largo de toda la montaña, quedando éste enterrado practicamente en su totalidad por las mismas.

Hallábame yo tratando de alcanzar la cima cuando a media montaña me llamó poderosamente la atención algo que supuestamente no debería estar allí, de hecho era el único y, milagrosamente, todavía vivo a pesar de la mucha madera muerta que lo copaba casi en su totalidad.

Por todos es sabido que el tejo es una especie protegida así que, sin ánimo de echarle mano, si me dispuse a retirar parte de la cubierta de rocas con el único fin de sacarle unas cuantas fotos que ahora os cuelgo por este blog.
No pude, eso sí, quitarte la totalidad de la cubierta de rocas pues a cada piedra que quitaba otra ocupaba su lugar al caer esta por efecto de la inclinación del terreno.

Todavía con la cubierta de rocas












Ni decir tengo que, tras sacarle las fotos, volví a taparlo tal cual estaba y allí, en el lugar en el que milagrosamente todavía pervive sigue estando. Quien sabe, pueda que algún que otro siglo más lo contemplen.

Como tampoco se vino conmigo esta sabina debido a su excesivo tamaño (me daba por la cintura) y sobre todo por el hecho de encontrarme sólo. Cosa que no recomiendo por los muchos acantilados que se dan en las zonas donde estos árboles, maravillosos aun en su estado salvaje, sobreviven a las muy duras condiciones climáticas de alta montaña.


miércoles, 5 de octubre de 2011

Boceto, uuuuno más

El siguiente boceto lo realizé por encargo.

La verdad es que la primera vez que uno ve éste árbol, la impresión es impactante. Se trata sin duda de un árbol que, bien llevado, dará que hablar en el futuro.
Teniendo en cuenta esto, la verdad es que me he esmerado a la hora de realizarle el boceto y he tratado de sacarle su máximo potencial (siempre desde mi punto de vista), lo cual no excluye otras posibilidades que a la postre, puedan resultar si cabe todavía mejores.

Dicho esto, es de recibo comentar que el propietario ya tenía las ideas bastante claras de por donde irían los "tiros", pues me había enviado un esbozo en el cual ya aparecían reflejadas una serie de particularidades que me facilitaron sobremanera la realización del mismo.

Particularidades como podrían ser el hecho de estar (en el esbozo), plantado ya en una maceta alta, exactamente con el mismo ángulo de plantación que también he tenido a bien en escoger y por último, y no por ello menos importante, una distribución del verde más potenciado hacia su lado izquierdo.
Con estas premisas, resulta bastante obvio que su propietario ya tenía las ideas más que claras de lo que quería sacar del ejemplar y por esto mismo, sospecho que mi participación de cara al interesado, no era nada más que pulir detalles.

Mi participación pues, se ha limitado a recomendar mediante el dibujo, el hecho de abrir la curva donde éste levanta y retoma la vertical y por la contra, la siguiente cerrarla ligeramente.
Con esto conseguimos:

1º  - Que el extremo final de esta curva a abrir no sobresalga en demasía de la curva anterior y quede encauzada en una diagonal claramente inclinada, como le corresponde a un árbol que "arranca" de tamaña manera.

2º  - Como complemento a la abertura de la rama citada anteriormente y, tras cerrar ligeramente la siguiente inmediatamente contigua a la misma, la distribución del verde de esta guisa se facilite sustancialmente.


¿ Por qué dejar el verde más largo en su lado izquierdo?. Pues por la sencilla razón de que, de hacerlo al revés, dejando el verde más largo en su lado derecho, debido al ángulo de plantación en el que éste está, daría la impresión de estar calléndose. Hecho que también se ve compensado por el estilo de maceta elegida. Es decir, alta. Lo cual ayuda también a que no dé la impresión de estar siempre calléndose.

Esto no siempre es así. Es más, para la mayoría de los árboles inclinados, le correspondería una distribución del verde más larga hacia al lado en que se inclina, no siendo la tónica habitual adecuada para éste caso en concreto, debido al tramo ya tan largo que se inclina desde el principio.

Y bueno, hasta aquí es lo que ha dado de sí éste post.

Saludos.

Recordaros que si alguno está interesado en recibir un boceto por encargo de alguno de vuestros árboles sólo teneis que poneros en contacto conmigo a través del siguiente correo:

vistaleda@hotmail.com


P.D.   NO SÉ PORQUÉ EL BLOG NO ME DEJA CONTESTAR COMENTARIOS PERO AGRADECER, SE AGRADECEN.

domingo, 2 de octubre de 2011

El embarrar se va acabar

Con la siguiente entrada quiero dejar constancia del proceso de evolución que llevará a un pequeño huerto, anodino y carente de todo interés a convertirse en un cuando menos resultón jardín de bonsais.
Ni que decir tengo que el huerto, de mi propiedad ( en realidad es de mis viejos), es donde hasta ahora tenía mis intentos de bonsai amontonados de cualquier manera.
Confieso que hasta la fecha y ante la inminencia de alguna visita no podía dejar de ponerme nervioso ya que no sólo tenía a estos amontonados de cuaquier forma sinó que además, el huerto, la mayor parte de las veces húmedo, cuando no mojado (recordad que esto es Galicia), causaba la molestia, inevitable, de que el visitante se marchase con los zapatos completamente embarrados, causándome esto último y a la postre no poca verguenza.
Decidido a ponerle remedio a esto y, coincidiendo con el primer aniversario del blog, me he puesto manos a la obra. El resultado (por el momento) es el que podéis ver en las fotos.
No persigo con ello grandes pretensiones de convertirlo en un jardín que sea la repera. Ni siquiera que sea un jardín al estilo japonés. Si espero que sea cuando menos funcional y agradable a la vista.
¡Ah!, y a poder ser que no ensucie. Uno en el cual el visitante se valla con el cazado limpio y bien limpio.

Con eso me conformo.









Inconcluso todavía éste, os iré poniendo más fotos de su evolución, a falta todavía por convencer a mis viejos de la necesidad o no de la eliminación de los dos limoneros que crecen justo en el medio.